Bajaste del tren y viniste a mi encuentro. Te ví llegar. Como no podía ser de otra manera, me detuve cinco segundos para observar tu andar. Pausado...cadencioso. Bajé del auto, te saludé con un beso largo, te miré...
-Hola! Estás hermosa..!
-Ay...a cuántas les dirás lo mismo..!
-Hoy? Sólo a vos...
-Jodeme...y te quedás sin postre...
-Tengo snacks, queso, un malbec de puta madre... Sería injusto!
-Quedarte sin postre? Te arriesgás?
-Obvio! Pero no quiero!
-Entonces, mi chiquito, haga bien los deberes...
-Usted dirá...
-La verdad...no me puedo quejar... A su edad, y con este capullito...
-Vamos, pendeja... Tengo un par de cosas que enseñarte...
-Ja ja...
-No sé por qué te reís...
-Querés que me haga trencitas?
-Lolita? Había pensado en otra cosa...
-Me intriga... Contame...qué habías pensado para hoy?
-Te conseguí un sombrero...

Sombrero - Fernando Natali
Georgie