Usualmente trato de guardar cierta compostura. No sé si llamarlo "poses". Yo diría, "conservar un estado en el que no despierte sospechas", en el que la gente con quien frecuento, mi gente, me vea contento y despreocupado. No los responsabilizo, al contrario. No puedo dejar de agradecerles por esta actitud. El haber pasado por una depresión, la incomprehensión, el atravesarla, sufrirla y superarla, no es tarea fácil para quien la vivió y para quienes lo acompañaron en el trance. Por eso el porqué del agradecimiento. Por eso, también, la toma de recaudos y el no querer preocupar.
Tristeza y melancolía
por Graciela Paula Caldeiro
"¿Hay un límite identificable entre el simple pesar y la depresión? Se dice que la depresión tiene claros efectos físicos como el insomnio y el embotamiento, e intelectuales también, como la imposibilidad de concentrarse o memorizar. También se afirma que es posible, que la persona deprimida tienda a enredarse aún más en sus pensamientos deprimentes ... Continuar leyendo