No voy a decirles que no me seduce la idea. Pero a los que contamos con un fuerte sentido de la auto-censura, la idea de tener sexo en un avión me parece inapropiada. O por lo menos hasta ahora.
Dos noticias recientes, extraídas de 20 Minutos, me hacen reflexionar sobre el tema.
GRITITOS EN LA MADRUGADA
La empresa Singapore Airlines tomó el inusual paso de solicitarle públicamente a los pasajeros de sus nuevos aviones Airbus A380 que se abstengan de mantener relaciones sexuales a bordo de esas aeronaves.
El potencial problema ha surgido porque la zona de primera clase de este super avión contiene 12 suites privadas con camas dobles. Singapore, la primera aerolínea en hacer volar al A380, alega que las recámaras no tienen aislamiento de sonido, y que no querría ofender a otros pasajeros, o a la tripulación.
Singapore añadió que aunque los compartimentos son privados, no son totalmente cerrados. "Todo lo que pedimos de nuestros usuarios es que cuando estén abordo de nuestros aviones, observen estándares que no sean ofensivos a otros usuarios o a la tripulación", señaló la empresa en un comunicado.
Chicos de Singapore, no sean malitos. Con una buena insonorización de las suites solucionamos todo. Y el que quiera celeste, que le cueste. Pero que lo disfrute.
POLVO DE ESTRELLAS

Una azafata ha sido suspendida de empleo y sueldo por mantener supuestas relaciones sexuales con el actor británico Ralph Fiennes durante un vuelo de la aerolínea australiana Qantas, según publica el rotativo Herald Sun.
Lisa Robertson, la auxiliar de vuelo que atendió a Fiennes cuando éste viajaba el pasado 24 de enero en clase de negocios desde Darwin a Mumbai (India), envió una nota a Qantas, a la que tuvo acceso el rotativo australiano.
Del texto se deduce que Robertson fue acusada por miembros de la tripulación de violar las normas internas al entrar al baño del avión junto al actor que protagonizó "La Lista de Schlinder", entre otros filmes.
Esos mismos testigos afirmaron también que Robertson, de 38 años, mantuvo una charla con Fiennes cuando el actor se sentó junto a ella durante su tiempo de descanso en el espacio destinado a las azafatas.
Robertson ha negado que hubiera contacto sexual entre ambos, pero reconoció que charló varias veces con Fiennes, de 44 años, y que el artista le acompañó después al servicio.
"Mientras conversé con el señor Fiennes en mi tiempo de descanso le expresé mi necesidad de ir al baño (...) Fui al más cercano y él me siguió, pero le expliqué que eso era inapropiado y le pedí que se fuera", ha explicado Robertson en su nota.
La auxiliar ha añadido que Fiennes se mostró "amoroso hacía mi y después de un corto periodo de tiempo le convencí de que abandonara el baño, cosa que hizo".
Qantas investiga ahora el incidente para decidir si despide o no a la azafata. Fiennes, que había actuado en el Festival de las Artes de Sydney, se dirigía a India para participar en una campaña a favor de las víctimas del sida.
Ralph, protagonista también del film "El Jardinero Fiel", se ha tomado muy a pecho a su personaje, e insiste en practicar su hobbie, también, en los jardines celestiales. Enhorabuena.
Georgie
Notas extraídas de 20 Minutos http://20minutos.es