Hay profesiones que exigen un minucioso cuidado al momento de ejercerlas. No sólo cuidado, sino que además demandan el uso irrestricto de códigos que no se pueden violar bajo ningún concepto. La medicina es una de ellas. Y dentro de la medicina, la rama de la ginecología requiere especial atención. El hecho de que el profesional deba cumplir con sus funciones, justo en el mismo sitio en que los demás nos divertimos, no lo exime de guardar la conducta adecuada. Y si no me creen, fíjense lo que le pasó a un facultativo barcelonés.
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Nota de 20 Minutos
MULTAN A UN GINECÓLOGO POR DECIRLE A UNA PACIENTE QUE SE METIERA UNA BERENJENA
La Audiencia de Barcelona ha condenado a una multa de 200 euros a un ginecólogo por vejar a una paciente al decirle que "se introdujese una berenjena y volviera a visitarle".
Los tres magistrados concluyen que son "palabras irrefutablemente ofensivas dirigidas a menospreciar la dignidad de la paciente".
En un principio, el jurado absolvió al médico pero la Audiencia ha estimado el recurso presentado por la afectada.
El médico alegó que la frase se pronunció en un momento de distensión. Pero ahora los jueces concluyen que la frase es vejatoria porque "no eran amigos ni compartían una relación profesional de igualdad".
"Al contrario, él era un médico que ejercía funciones tan ‘sensibles' como es una exploración ginecológica, y por tanto, su posición era de dominio técnico", afirman los jueces.
La condena es consecuencia de una multa impuesta a razón de diez euros por día "atendiendo a la solvencia del culpable", por 20 días.
El tribunal, en cambio, no admite la reclamación "de 3.000 euros porque la mujer pasó dos semanas de baja laboral y abstinencia sexual con su pareja" porque el informe pericial no recoge ninguna afectación traumática.
Fuente: 20 Minutos http://20minutos.es/noticia303797/0/ginecologo/paciente/berenjena/
No, señoras y señoritas. No se trata de una nueva terapia. En última instancia (y siendo benevolentes) tomémoslo como un abuso de confianza. Y tratándose de cuestiones tan íntimas, mejor que una berenjena, el amor.
Georgie